domingo, 17 de octubre de 2010

Cogito ergo sum

Pienso en la creatividad de la soledad.
pienso en como funcionan las teorías sin práctica,
en los lamentos sin fundamento, en la relatividad del tiempo,
en los deseos utópicos y en los sinsentidos.
Cuántas cosas tienen sentido para la razón y carecen de este
para otras cosas que no son ellas.
Pienso en la metamorfosis de Kafka, en el devenir obligatoriamente
necesario de Heráclito, en el Ser eterno de Parménides.
Pienso en la realidad de las paradojas, en lo irónico de ellas, en la
verdad que se esconde tras la ironía socrática y en todas las que
no pensó Sócrates.
Pienso en todos los paradigmas de Khun y en su inconmensurabilidad.
Pienso, luego existo,
 y existo en la medida que soy, y soy eso innombrable,
eso que hago, que siento, eso que no comprendo, eso que quiero y no quiero,
eso que doy y que escondo, eso a lo que no llego, eso que se deja y no se deja ser,
eso que es idea y mentira, que respira,
 inspira-expira y muere.
                                       Virginia Dsvn

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